Amorce – Paper, Index, Trace

“Contamino mi entorno con rastro.”

— Uri Aran

Rosalind Krauss, en Notes on the Index (1977), distingue el índice de otros tipos de signos. A diferencia del símbolo, que es arbitrario, o del ícono, que funciona mediante la semejanza, el índice surge a través del contacto. Es la huella impresa en la arena, la sombra que cae sobre una pared, el moretón o la mancha. Los índices son “marcas o rastros de una causa particular, y esa causa es aquello a lo que se refieren”. No son representaciones de algo ausente, sino consecuencias físicas de una presencia.

Esta exposición amplía la reflexión de Krauss hacia las obras sobre papel. El papel se aborda no como un soporte neutro, sino como una superficie indicial, más cercana a un banco de arena o a una placa fotográfica. Cada inscripción —grafito, tinta, mancha, pliegue o presión— da testimonio del contacto, de un gesto, de un acontecimiento. Bajo esta perspectiva, estos rastros no son solo expresivos y comunicativos, sino también archivísticos: registran las condiciones del cuerpo al estar en el mundo.

Amorce – Paper, Index, Trace desarrolla una exploración del papel como superficie de registro, del índice como consecuencia de la presencia corporal y del rastro como su residuo persistente. El papel, entonces, es menos un soporte pasivo que una piel porosa. Las fibras reciben hendiduras y pliegues, convirtiéndose a la vez en superficie y en memoria, donde el cuerpo, la herramienta y el entorno se imprimen de maneras tanto deliberadas como involuntarias.

Mirar estas obras es encontrarse con algo más que la forma: son umbrales donde la presencia se registra y se transforma, donde lo efímero perdura como memoria, impresión y tacto. El peso de una mano, el ritmo de la respiración, la pausa de la atención —cada uno deja su huella. Las obras sobre papel reflejan esta condición, reuniendo rastros que revelan no sólo la intención, sino también aquello que excede el control.

— Third Born