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Unicornios andan sueltos: entrevista a Luis Aduna sobre el trabajo de Gilberto Aceves Navarro

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Unicornios andan sueltos: entrevista a Luis Aduna sobre el trabajo de Gilberto Aceves Navarro

por Bruno Enciso

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6 min

De las 7000 formas de atrapar un unicornio es la serie que me introdujo al trabajo de Gilberto Aceves Navarro. La historia reconoce a Aceves Navarro como integrante de la Generación de la Ruptura y como representante de la abstracción en México. Lejos de las categorías, al mirar, recuerdo haber pensado: ¡Claro! La existencia de los unicornios será innegable luego de haber atrapado uno. No es una tarea sencilla. Si esbozar una sola manera de lograrlo resulta bastante complejo, enlistar siete mil suena como una empresa de dimensiones descomunales.

Aceves se aventuró, con audacia, en la captura de esta bestia y produjo mucha pintura alrededor de las experiencias que le trajo. También hizo series sobre otros animales, mitos antiguos, estampas sociales e históricas, autorretratos, abstracciones del espacio y la materia, etc. Eso sin mencionar su incesante labor como maestro, la cual sigue produciendo efectos en varias generaciones de artistas.

Gilberto Aceves Navarro, Sin título, 1985, óleo sobre tela, 160 x 140 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Gilberto Aceves Navarro, Sin título, 1985, óleo sobre tela, 160 x 140 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

Gilberto Aceves Navarro falleció hace apenas unos meses, en octubre del 2019, a la edad de 88 años. Para reconocer algunas de las lecciones que en vida compartió como pintor y profesor, le hice algunas preguntas al artista Luis Aduna, alumno suyo durante cuatro años y asistente en algunas de sus más recientes producciones.

Bruno Enciso: ¿Cómo crees que Aceves pensaba la pintura? ¿Dónde localizaba su complejidad o su potencia?

Luis Aduna: La pintura aparecía como el motor de su vida. Creo que la pensaba como un acto transformador, en perpetuo estado de cambio. Lo complejo para él radicaba en transformar sus miedos en una suerte de libertad plástica que le permitiera echar a andar su ingenio e inventiva técnica y formal. Creo que él diría que lo verdaderamente potente de todo esto es la extraña forma en la cual la expresión de un momento particular puede ser de interés para los demás a través de dicha transformación.

Como su alumno encuentro muy valioso haberme formado con alguien que no pensara que existe una sola manera de pintar o un estilo que buscar. A la hora de producir, eso me ha aportado una visión amplia de la práctica de la pintura y sus posibilidades.

BE: ¿Cómo era el proceso de producción de sus series?

LA: En el tiempo en que trabajé como su asistente me pareció que utilizaba las series para expandir una idea o un tema tanto como fuera posible y generar un cuestionamiento estético sobre la pintura misma. Esto lo hacía procurando que hubiera un diálogo plástico entre las propias piezas que integran cada serie.

En la serie del unicornio, por ejemplo, veo algo muy interesante en la idea de poner a prueba la eficacia de la fantasía y su capacidad de acercarse a lo real de una forma muy asertiva en comparación con otras formas propiamente “realistas”. No hay que olvidar que Gilberto fue un artista que formó parte de la llamada ruptura, un momento en que la pintura mexicana fue influenciada por el pensamiento vanguardista y la tendencia a la abstracción.

BE: ¿Tienes alguna obra favorita en esta serie?

LA: 'Pancho Villa atrapando su unicornio' me gusta bastante, tiene la ironía y el ingenio que tanto lo caracterizaba.

Gilberto Aceves Navarro, Pancho Villa atrapa a su unicornio, 1996, acrílico en tela, 120 x 140 cm. Cortesía: Fundación Aceves Navarro AC
Gilberto Aceves Navarro, Pancho Villa atrapa a su unicornio, 1996, acrílico en tela, 120 x 140 cm. Cortesía: Fundación Aceves Navarro AC

BE: ¿Cuál es tu experiencia como alumno? ¿Cómo era su manera de dar clase?

LA: Estuve en su taller de dibujo durante cuatro años y tengo la impresión de que disfrutaba mucho convivir con personas que tuvieran intereses afines a los suyos porque esto le permitía salirse del solitario y pesado lugar del pintor. Le encantaban las bromas y ser irónico. Sobre todo, creo que valoraba el interés de los demás por una práctica que le había aportado mucho a su vida y saber que él podía enriquecerla para otros.

Su manera de enseñar estaba llena de humor y vitalidad, frente al grupo se tomaba muy en serio el no ser serio. Siempre transmitiendo su ánimo de lucha contra la solemnidad académica e inventando estrategias incorporadas a una metodología muy precisa, casi como una dieta o una gimnasia en perpetuo cuestionamiento.

Creo que lo que lo que más aprecio de haber sido su alumno y asistente es haber entendido que la ligereza permite abordar cuestiones críticas con mayor seriedad y franqueza, tanto en lo personal como en las prácticas artísticas.

Luis Aduna, Snap, 130 x 90 cm, acrílico sobre cartón, 2019. Cortesía del artista
Luis Aduna, Snap, 130 x 90 cm, acrílico sobre cartón, 2019. Cortesía del artista

BE: ¿Te parece que Aceves logró atrapar un unicornio?

LA: Me parece que lo que Aceves buscaba era escaparse de sí mismo o perderse dentro de sí mismo y sin duda en la pintura logró crear las condiciones para mantenerse en esa búsqueda toda su vida. Quizá a eso puede llamársele atrapar un unicornio o, también, que un unicornio te atrape.

Gilberto Aceves Navarro, Sueño del unicornio, 1996, acrílico sobre tela, 205 x 300 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Gilberto Aceves Navarro, Sueño del unicornio, 1996, acrílico sobre tela, 205 x 300 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

Gilberto Aceves Navarro, Isenheim (Tríptico), 2019, óleo sobre tela, 150 x 450 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Víctor Mendoza
Gilberto Aceves Navarro, Isenheim (Tríptico), 2019, óleo sobre tela, 150 x 450 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Víctor Mendoza

Gilberto Aceves Navarro, El de Van Gogh II, 1988, Óleo sobre tela, 100 x 120 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Gilberto Aceves Navarro, El de Van Gogh II, 1988, Óleo sobre tela, 100 x 120 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

Gilberto Aceves Navarro, Felipe II en el burdel (detalle), 2001, acrílico sobre tela, 120 x 140 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Gilberto Aceves Navarro, Felipe II en el burdel (detalle), 2001, acrílico sobre tela, 120 x 140 cm. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

Gilberto Aceves Navarro, Unicornio atrapado en la fiesta, 1996, acrílico sobre tela, 160 x 330 cm. Cortesía: Fundación Aceves Navarro AC
Gilberto Aceves Navarro, Unicornio atrapado en la fiesta, 1996, acrílico sobre tela, 160 x 330 cm. Cortesía: Fundación Aceves Navarro AC

En el contexto incierto que atravesamos en la actualidad, mi interés en la serie del unicornio cobra especial fuerza. Pienso en la criatura no como un ser fantástico ni como un símbolo, sino como un horizonte. El unicornio que insiste en escaparse puede orillar a quien lo busque a escoger sus herramientas, configurar una estrategia, considerar sus alianzas, modular sus energías, cambiar de velocidad y mantener la mirada atenta.

Esta breve entrevista me deja pensando en lo mucho que queda por ver dentro de la obra del maestro, producida en un movimiento doble. Por un lado, Aceves generaba preguntas propias para extender una búsqueda personal, visitando sus curiosidades y sus zonas oscuras. Por el otro, mantenía a la vista que su pintura convivía con la mirada de otros, con quienes entraba en conversación, usando un tono distinto en cada serie. Adentrarse en su trabajo supone, además de un amplio espectro de temas, una serie de oportunidades para pensar la relación entre un sujeto y su espacio en la pintura.

En Onda MX celebramos la vida y obra de Gilberto Aceves Navarro.

Vista de sala, 1931 - 2019: Homenaje a Gilberto Aceves Navarro, Galería Hilario Galguera, Ciudad de México, 2020
Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Vista de sala, 1931 - 2019: Homenaje a Gilberto Aceves Navarro, Galería Hilario Galguera, Ciudad de México, 2020 Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

Vista de sala, 1931 - 2019: Homenaje a Gilberto Aceves Navarro, Galería Hilario Galguera, Mexico City, 2020. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López
Vista de sala, 1931 - 2019: Homenaje a Gilberto Aceves Navarro, Galería Hilario Galguera, Mexico City, 2020. Cortesía: Galería Hilario Galguera. Foto: Sergio López

La Galería Hilario Galguera expone una selección de obras provenientes de distintos momentos de la vida del artista en 1931 – 2019 Homenaje a Gilberto Aceves Navarro. Podrá visitarse en cuanto la galería vuelva a abrir sus puertas, luego de la emergencia sanitaria.

Publicado el 1 mayo 2020