La danza de dos soles: Rometti Costales en el Museo Jumex

Los metafísicos de Tlön no buscan la verdad,
ni siquiera la verosimilitud: buscan el asombro.
— Jorge Luis Borges

Hoy sabemos que muchas de las estrellas donde hemos proyectado el origen de lo inexplicable, la guía para la caminata nocturna o las historias que preceden a la identidad de los pueblos, ya han muerto, quizás hace cientos de años, y lo que vemos es la luz que sigue viajando en el espacio y atravesando el universo hasta llegar a nuestro ojo. El entendimiento de nuestro lugar en el cosmos se basa en esferas de luz que ya no existen pero que aún podemos ver. En la contemplación de la bóveda celeste, entendemos que lo real no es más que un consenso en el que todxs decidimos que algo es, habita y existe.

Ante la fragilidad de lo verdadero, los artistas Rometti Costales (Julia Rometti y Victor Costales) navegan las posibilidades de lo ficticio como un espacio para la creación de realidades. A partir de la minuciosa observación e investigación de un contexto, narración o evento político, crean constelaciones de conceptos e imágenes que usan de maneras poéticas e improbables para proponer nuevos significados, en un desdoblamiento de la historia política, social, geológica y hasta antropológica de los espacios. Dentro del marco de la exposición Excepciones Normales: Arte contemporáneo en México, curada por Kit Hammonds, se lleva a cabo Aires Acondicionados, en una colaboración curatorial entre Juan Canela – director artístico de ZSONA MACO– y el Museo Jumex. En ella, el dúo artístico realiza un trazado del cotidiano del museo, a través de los detalles más sensibles: los fenómenos lumínicos, los cambios de turno del museo y los procesos de introspección de quienes trabajan en él.

VC: Nuestro punto de partida fue tomar el edificio mismo como detonante tanto de las intervenciones como de las piezas. Nos interesaron varios aspectos: desde su materialidad hasta sus mecánicas internas, los flujos, el funcionamiento del organismo del museo y ciertos fenómenos naturales que ocurren alrededor y son condicionados por la arquitectura misma.

Los eventos que pasan desapercibidos son el susurro que conforma el entramado de microhistorias del lugar. Uno de los fenómenos que llamó la atención de Rometti Costales fue la conjugación de luces que convergen en el museo durante los últimos meses de invierno, donde la luz del sol y su reflejo en los espejos del edificio aledaño crean dos fuentes lumínicas en la sala, durante momentos exactos del día. Dado que la exposición sucede principalmente en mayo y la posición del sol cambia, esto no sucederá de forma natural:

VC: Ya no existe este fenómeno, pero existió. Existe en suspenso, en su pasado inmediato y en su futuro: existe en sus ciclos. Esto dio pauta a un trabajo que es la recreación de este fenómeno pero con dispositivos que son construidos por nosotros.

De esta manera, lo ficticio y lo creado son herramientas que se utilizan para reflexionar sobre la construcción de lo real y de la Historia. Un rayo de sol puede ser el momento micro-microhistórico que se desenvuelve en la composición del edificio, al que sólo podemos acceder a través de la simulación.

KH: En el contexto de Excepciones Normales, la idea de que una exposición puede escribir una historia es una pregunta transversal: ¿Quién escribe la historia? ¿Qué es válido y qué no? La idea es poner atención a cosas que normalmente no están en esta historia. Hablar de un momento en el día donde hay dos soles no es un evento muy histórico, pero podría ser muy importante.

Además de las piezas realizadas por Rometti Costales, se llevarán a cabo distintas actividades e intervenciones realizadas por invitados como Lorena Ancona, Minia Biabiany, Jorge Satorre y Fernando Ortega, entre otros. Tanto Lorena Ancona y Jorge Satorre están exponiendo al mismo tiempo en el museo, lo cual genera un diálogo entre los artistas que va hilando y expandiendo los discursos; un relato escrito a muchas manos.

VC: Invitamos al filósofo Sergio Freidberg a una conversación sobre las nociones del tiempo y cómo éste construye la realidad. También a la académica Fidèle Vlavo, quien da clases sobre inteligencia artificial, con ella hablaremos sobre la teoría de simulación. Entonces, todo tiene que ver con lo mismo: qué es lo falso, qué es verdadero, hasta qué punto estas dos cosas se cruzan y pueden confundir a uno. Lo interesante es que a veces son instantes en el tiempo: son dudas que duran un momento y luego vuelves a lo normal, pero lo interesante es tener la duda que te desterritorializa.

La exposición ocurre principalmente en los tiempos de espera de la activación, lo que la convierte en un espacio latente. Lo que sucedió y lo que sucederá en él son, finalmente, cosas que existen en el presente por su virtualidad, por el mero hecho de la posibilidad de la acción o por el recuerdo de la misma. De esta forma, las piezas funcionan como proyecciones crepusculares entre algo que existe en la mente y su proceso de materialización.

VC: Algunas cosas están en suspenso. Cuando el público visita el museo, quizás nunca verá el fenómeno generado por la pieza, entonces lo que ve es el dispositivo para que esto suceda. Julia dice que es como un molde, tienes el positivo y el negativo: el positivo es el fenómeno que va a suceder pero no está sucediendo, el negativo, lo que lo contiene y lo posibilita, lo que lo va a ser visible.

Más que con certezas, la escritura histórica de Rometti Costales se construye con dudas. Esta vez, la luz que no nos llega es un vestigio de lo que tiene la posibilidad de ser y que nos estamos perdiendo sólo por un infortunio temporal, una dislocación de la expectativa y el tránsito de nuestro planeta alrededor del sol. Los eventos ocurren aún cuando no estamos mirando, sin contemplación, por sí mismos; su presencia en la Historia existe, aunque se registre a través de su simulación. Al ver la exposición, los artistas invitan al público a creer en lo que está sucediendo, a sellar el pacto cómplice y decidir que, por un momento, lo que ven es lo real.

— Antonia Alarcón

La exposición Aires Acondicionados estará abierta desde el 29 de abril al 20 de junio del 2021.

Las colaboraciones de Excepciones Normales cambiarán a lo largo de la exposición y la cual podrá visitarse hasta el 15 de agosto.