¿Realmente se detuvo? Pausa, las miradas del confinamiento

La pausa es un elemento imprescindible en cualquier proceso creativo, su presencia construye el ritmo y la cadencia. Patricia Conde Galería ha tomado en cuenta este elemento para nombrar su más reciente proyecto. Pausa alude a la intimidad de un paréntesis que nos trastoca a todos: la obligación de quedarnos quietos para volvernos un poco más inalcanzables ante una amenaza intangible.

De Pausa forman parte todos los artistas representados por Patricia Conde. La galería solicitó una imagen a cada uno para integrar un archivo histórico representativo de este momento sin precedentes, caracterizado por su cadencia impredecible, hipnótica y, a veces, infame. De esa manera, se integró una carpeta con 28 piezas que provienen de las revisiones de los archivos o de capturas nuevas a partir de la mirada desde el confinamiento; un registro que ha de cohabitar en la historia junto a las cuentas acumuladas de pacientes diagnosticados y de los decesos.

“Me asombra pensar y todavía no logro entender que todo el mundo se detuvo de repente”, así dijo la galerista durante la presentación del proyecto en los primeros días de agosto. “Aquellos artistas que no pudieron salir a la calle para hacer su trabajo, hicieron una revisión de los archivos para encontrar joyas que ahora tienen otra lectura. De tal manera que todo se hizo condicionado por la pandemia. Cada uno conservó su expresión en la fotografía. Si los conocemos, aunque sea un poco, nos damos cuenta de quién es la fotografía que estamos viendo”.

Para la imagen titulada ¿Sin vuelo posible?, Cristina Kahlo colocó una reproducción humana en miniatura dentro de una jaula para aves; quiso capturar la sensación colectiva sobre la imposibilidad física para emprender el vuelo y, al mismo tiempo, demostrar que no hay confinamientos posibles para el pensamiento.

En Las alas de la vida, César Ordoñez retrató la sombra de un par de guantes proyectada sobre los adoquines. La composición invita a especular sobre lo que sostiene a los objetos porque parece que vuelan por encima del fotógrafo, como dos alones que hallaron la manera de emanciparse del tórax. Al mismo tiempo, la pieza nos invita a pensar en lo que simbolizan los guantes en un momento en el que el tacto no es lo que solía ser.

Adam Wiseman eligió la imagen Lejos de México, encima del Tesco Express, la cuarentena la comparte con su novio. Cerca de la Universidad Goldsmiths, Londres, un argumento visual sobre el voyerismo como un aliado del confinamiento. El artista fotografió la fachada de un edificio de departamentos en la capital inglesa. En ella se observan, en su mayoría, ventanas cerradas y luces apagadas, excepto en una de ellas, desde donde se asoma una pareja en el resguardo. Son únicamente ellos, pero pareciera que somos todos proyectados en sus rostros, asomándonos desde el marco de la ventana al escenario de una vida que está tanto a unos pasos como lejos.

Patricia Lagarde propuso La mesa puesta como paráfrasis de la imagen homónima del litógrafo francés Joseph Nicéphore Niépce. Vemos una disposición, a manera de bodegón, con elementos habituales: un platón, un par de copas, dos cubiertos, el jarrón y el florero. Para Lagarde, la mesa y sus objetos condensan el encuentro, los afectos, la intimidad y la soledad; integran un punto central del ser humano, sin importar su latitud. Es en la mesa donde la casa cobra nuevas dimensiones y es la mesa la que nos habita, el vehículo fundamental del encierro, del ritual compartido o desolado.

De cada imagen se han impreso 20 copias sobre papel algodón, además de una versión para la galería y una para el autor. El archivo original será destruido. Cada pieza está disponible para su venta con un costo de siete mil pesos. Como parte del proyecto, cada dos semanas se ofrecen presentaciones virtuales con la participación de cuatro artistas que explican el origen de su propuesta, mismas que podrán visualizarse a través de Zoom (para más información escribir a info@patriciacondegaleria.com).

Finalmente, cada obra es distinta a la anterior y a la próxima, pero forma parte de una composición de aquello que nos transgrede por igual. Sin fecha específica prevista para su conclusión, el proyecto durará alrededor de cuatro meses, mismos en los que cada artista presentará su trabajo. Las piezas ya están a la venta a través de la página patriciaconde.online.

Artistas: Cynthia Araf, Cannon Bernáldez, Alejandro Cartagena, Belinda Garen, Alexandra Germán, Javier Hinojosa, Cristina Kahlo, Patricia Lagarde, Moisés Levy, José Antonio Martínez, Francisco Mata Rosas, César Ordóñez, Dulce Pinzón, Ilán Rabchinskey, Humberto Ríos, Patricio Robles Gil, Oswaldo Ruiz, Adam Wiseman, Renate Aller, George Nobechi, Paola Dávila, Olin Heitmann, Sofía Ayarzagoitia, Laura Cohen, Juan Carlos Coppel, Mariela Sancari