Luis Enrique Zela-Koort

N.A.S.A.L. presenta Todos los pulsos posibles de Luis Enrique Zela-Koort (Perú, 1994).

En este nuevo cuerpo de trabajo, Zela explora a la vez un enfoque científico y artístico del cuerpo como un poderoso organismo y contenedor, trabajando a favor y en contra; adentrándose en los universos vastos que existen dentro nuestro, mientras propone lecturas alternativas de los mecanismos y narrativas que todos llevamos dentro.

Por mucho que la exposición se centre en la reproducción, no en el sentido de reproducirnos a nosotros mismos y crear niños, sino más bien en la reproducción en el sentido de multiplicidad y creación de escuelas, comunidades y familias, para bien o para mal, un reconocimiento de la asombrosa capacidad de la naturaleza para mutar y recrearse perpetuamente. Rápidamente nos lleva a preguntarnos cómo somos productores de una moneda, un producto de nuestros entornos, relatos fragmentados y siempre existentes en el tejido del sistema capitalista. En este contexto expositivo, los modos binarios se ven obligados a desestabilizar y dar lugar a un nuevo cuerpo, nuevos seres vivos y nuevos modos de existir. Especulando relaciones sensuales y porosas entre seres, paisajes, deshaciendo las barreras entre el interior y el exterior.

Esta metanarrativa queer que la exposición propone resulta un tanto ritualista, presentándose como un santuario abnegado. En la modernidad, para que uno sobreviva, el otro debe desintegrarse. Del mismo modo, en nosotros existe la confrontación y el sacrificio más infinitos, existe en nosotros la máxima potencialidad y compasión, por lo tanto, ¿Cómo articular esto, sin repetir las mismas modalidades productivas que pareciera estamos confinados a replicar? Aquí, Zela presenta unidad y comunidad, unísono, placer y deseo, y un guiño a los engranajes que hacen que todo gire.

— Silvana Lagos