Karen Rodríguez

Como parte del ciclo El dilema de unir los puntos, Proyectos Monclova inaugura la exposición El Poeta y el Calígrafo de la artista visual mexicana Karen Rodríguez, quien presenta su más reciente proyecto de investigación y producción artística sobre los espacios en blanco en la escritura y la caligrafía, para encontrar otros modos de creación escultórica.

Para la conceptualización de esta edición, Néstor Jiménez tomó como punto de partida la narrativa no lineal del arte y de los fenómenos culturales y sociales. Esta premisa sirve de marco para el trabajo de seis artistas con metodologías e inquietudes afines y trayectorias profesionales jóvenes. Entre las temáticas abordadas por los seis artistas destacan la observación y abstracción de la cultura visual en el espacio público, el despojo de territorios, las relaciones complejas entre la humanidad y la vida animal-vegetal y la crítica institucional.

Para ello, exhibe piezas elaboradas en óleo pastel, lápices de colores y tinta sobre lienzo, que surgen al momento de imaginar y dibujar las formas del silencio y las pausas dadas por los espacios negativos entre letras y palabras. Posteriormente, esas piezas bidimensionales son traducidas a objetos tridimensionales, creando esculturas de cerámica, respetando elementos propios de la caligrafía como las formas puntiagudas o redondeadas de las letras.

Estas esculturas son realizadas con distintos tipos de arcillas y materiales cerámicos que al momento de entrar en contacto con las altas temperaturas dentro del horno cambian el color inicial que tenían. De tal manera que se pueden observar piezas con una paleta de color vibrante e incluso con efectos de iridiscencia.

Karen Rodríguez (Oaxaca, 1993) es artista visual egresada de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado (ENPEG), La Esmeralda. A través del dibujo, la pintura y cerámica la artista trabaja los elementos textuales y visuales que pueden encontrarse tanto en el espacio público, la cultura material y visual, así como en el propio uso del lenguaje. Particularmente, se encuentra explorando nuevas formas de creación escultórica a través de algunas nociones de la caligrafía, tomando como punto de partida los espacios negativos o silencios que existen cuando se diseñan las letras; imaginando así cómo influirían las nociones de la lingüística o la gramática al momento de configurar nuevas formas escultóricas.

Fue becaria del programa Jóvenes creadores (2019-2022) en la especialidad de pintura, participó en el VI Diplomado de Artes visuales (2017) en el Centro de las artes San Agustín, Oaxaca. Fue parte de la residencia Cobertizo (2023), Jilotepec, en el Estado de México. Ha participado en diversas exposiciones como Toda forma es línea (2023) en Espacio Mirador, Ciudad de México; Corazón egoísta (2023) en Ache Galería, San Luis Potosí; Exposición final de la residencia Pocoapoco (2022) Pocoapoco, Oaxaca; Creación en Movimiento del programa Jóvenes Creadores (2020) en el Centro de la Imagen, Ciudad de México; En Cautiverio, Camaleones (2021) en Soporte, Ciudad de México. Participó en las muestras Don’t get 2 close 2 my Fantasy (2020) en la galería Karen Huber, Ciudad de México; Primitivo fallido (2018) Los 14, Ciudad de México; El más triste recuerdo de Acapulco (2018), Proyectos Maleza, Bogotá; Re-Constructo (2018) en Zucca project space, Venecia; Proyecto santuario contra el mundo moderno (2017), como parte del sexto diplomado en Centro de las Artes San Agustín, Oaxaca; Construcción bruta (2017), en Galería espacio alternativo de la ENPEG La Esmeralda, Ciudad de México.

— Proyectos Monclova