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Abel Quezada

Proyectos Monclova se complace en anunciar la exposición Memorias visuales del artista mexicano Abel Quezada, una muestra que reúne pinturas al óleo, acuarelas y gobelinos elaborados con lana de distintos países. La exposición destaca tanto la habilidad técnica del artista en el uso de diversos materiales pictóricos, como su interés por una amplia gama de temas.

El trabajo de Abel Quezada ha sido ampliamente reconocido por su labor como cartonista, ilustrador, escritor y pintor. Aunque su principal actividad fue la caricatura política, a lo largo de los años realizó una profunda exploración pictórica, especialmente en el óleo, disciplina que practicaba con rigor todos los domingos. En sus pinturas aparecen retratos de personajes conocidos y desconocidos, figuras observadas durante sus viajes o imaginadas.

La exposición se organiza en torno a tres ejes temáticos que atraviesan su producción: deportes, memorias de viaje y paisajes. El primero de ellos muestran el imaginario visual deportivo del artista debido a su colaboración con periódicos especializados en crónicas deportivas desde la década de 1940. Las obras reunidas incluyen escenas de fútbol y béisbol, con composiciones aéreas que capturan el dinamismo del juego, así como retratos de billaristas y un notable óleo del boxeador estadounidense John L. Sullivan, considerado el primer campeón mundial de peso pesado bajo las reglas del boxeo con guantes. Esta pintura, inspirada en una célebre fotografía de Elmer Chickering, reinterpreta la icónica pose del púgil y añade ciertos elementos reconocibles en el deporte.

Otra sección presenta pinturas inspiradas en sus viajes de trabajo, en las que Quezada observaba con atención paisajes, escenas cotidianas y retratos de personajes que encontraba en el camino.

Obras como Mexicanos en el Oriental Express (1987) y Taxi con turistas mexicanos bajo intensa niebla de Londres retratan a figuras de la clase política y de los estratos altos de México durante sus estancias en el extranjero.

La muestra también incluye gobelinos basados en dibujos realizados durante su viaje de 1973 por Canadá, Inglaterra, Bélgica, Francia, la entonces Unión Soviética y China, como parte del séquito del presidente Luis Echeverría Álvarez. Durante este recorrido, Quezada registró sus impresiones mediante bocetos, notas y fotografías Polaroid, materiales que posteriormente dieron origen al libro 48,000 kilómetros en la línea de origen, del cual derivan los tapices expuestos.

Finalmente, la exposición reúne pinturas y acuarelas de paisajes urbanos, entre ellas Autorretrato en una ciudad con río, donde una vista aérea muestra una ciudad atravesada por un río, rodeada de edificios, automóviles y un aeropuerto. Así, esta muestra de Abel Quezada refleja no sólo los intereses principales del artista, sino también las memorias visuales que dejó plasmadas en su obra.

— Proyectos Monclova