Mariane Ibrahim presenta la exposición individual Los hilos invisibles son los lazos más fuertes una exposición sobre el recorrido artístico de Ayana V. Jackson en la última década, que marca la primera gran exposición de la artista en México.
El 14 de octubre a las 12 pm habrá un conversatorio en la galería entre la artista y Jumko Ogata (escritora y educadora).
La exposición presenta una selección de fotografías de varias series de la artista, entre ellas Archival Impulse (2011-2013), Dear Sarah (2016), Wild as the Wind (2015), Intimate Justice in the Stolen Moment (2018). Además, dará a conocer un nuevo cuerpo de trabajo de la serie más reciente You forgot to see me coming (2023).
Para Jackson, esta exposición representa un regreso a casa — su incursión en la fotografía comenzó precisamente en territorio mexicano, retratando a población afrodescendiente en la Costa Chica y Veracruz en African by Legacy, Mexican by Birth. Aunque esta serie no forma parte de la exposición actual, marcó un momento crucial en la evolución de su enfoque fotográfico.
A partir de 2011, somos testigos de este periodo de transformación, en el que la fotógrafa decide transitar a ser la protagonista de sus retratos. En sus propias palabras, “sentía que había algo en la forma en la que estaba trabajando que me estaba generando más trauma...¿Cómo quedarme quieta? Sentía la necesidad de sacudirme, moverme y preguntarme cómo nos vemos nosotros mismos. ¿Qué es lo que yo quiero ver?”.
Como resultado, se encuentra la serie presentada en la primera sala de la exposición, Archival Impulse, título que alude a la creación de nuevos sistemas de conocimiento mediante la confrontación con los archivos. En este caso, la confrontación comienza con los archivos fotográficos europeos de la época colonial. La artista se apropia de estos archivos para cuestionar la dinámica de poder que encierran, obligándonos a reflexionar sobre el potencial epistemológico de las fotografías originales.
La recreación histórica continúa en Wild as the Wind, pues Jackson se encuentra caracterizada en indumentaria del siglo XIX para mostrarse como un sujeto que no sólo es capaz de enunciarse en sus propios términos, sino que tiene plena capacidad de movimiento. Estos retratos entablan un diálogo con las rígidas imágenes de la época, transformándolas en representaciones que trascienden los confines del papel. La artista mira fijamente a la cámara, afirmando su transición de objeto deshumanizado a sujeto poderoso en todo su esplendor.
Intimate Justice in the Stolen Moment continúa esta exploración del movimiento. Los cuerpos de las mujeres negras, históricamente cargados, se liberan a través de la levedad en la obra de Jackson, contrarrestando el perdurable legado de deshumanización. Esta serie incorpora el único vídeo de la exposición, contraponiendo el delicado acto de vestirse y desvestirse con una canción que evoca la trágica historia de Sarah Baartman, conocida como la Venus Hotentote. Esto sirve como potente comentario sobre cómo la mirada blanca ha reducido históricamente a las mujeres negras a espectáculos.
Jackson analiza la polifacética identidad de Sarah Forbes Bonetta, una figura histórica esclavizada por el reino de Dahomey en el siglo XIX, que posteriormente se convirtió en protegida y ahijada de la Reina Victoria de Inglaterra en la serie Dear Sarah. Cada imagen recorre los distintos nombres que definieron a Sarah a lo largo de su vida, invitando al espectador a sondear las distinciones y puntos en común entre estas facetas.
En la última sala se nos presentan las piezas que sin duda resonarán entre el público mexicano y que constituyen las obras más recientes expuestas de su nueva serie, You forgot to see me coming. Este nuevo conjunto de obras, desarrollado durante su residencia en Alturas Foundation, explora la intersección de las mujeres negras e indígenas en los conflictos armados de principios del siglo XX, en particular la Revolución Mexicana. Empleando la caracterización de la época, estas obras evocan la levedad como punto focal temático. La artista hace referencia a figuras como Carmen Robles, del archivo Casasola, una coronel negra que luchó en el ejército zapatista, enfrentándose así a las representaciones racistas predominantes en la historia mexicana y subvirtiéndolas.
La obra de Ayana V. Jackson resulta indispensable para llevar a cabo discusiones sobre el papel anticolonial y antirracista que puede tener la fotografía, particularmente en un país como México, que se caracterizó por utilizar este medio para registrar “criminales” e indeseables de la sociedad a lo largo del siglo XX. Nos recuerda la dignidad de nuestros cuerpos y el derecho que tenemos a definir las historias que se cuentan sobre ellos, utilizando la cámara como herramienta para poner de cabeza las representaciones racistas del pasado. ¿Qué pasaría si tuviéramos la oportunidad de mostrarnos en nuestros propios términos?
— Extracto del texto por la escritora Jumko Ogata