↓
 ↓
Francia Monjaraz

Francia Monjaraz

A la sombra de la higuera

Exposición

-> 8 may 2025 – 22 may 2025

Espacio Impermanente y MADE presentan la exposición de Francia Monjaraz: A la sombra de la higuera, como parte del proyecto Salón 4307.

A la sombra de la higuera es la primera muesra individual de la artista Francia Monjaraz. Presentada en Espacio Impermanente, la exhibición forma parte de una serie de exposiciones dentro de un mismo espacio en colaboración con MADE en Monterrey.

En la intimidad de una habitación entre paredes cubiertas de fragmentos, se esconden unos seres azules que al ser mirados desvelan montones de secretos. En su corporalidad podemos ver como cada uno ha pasado por procesos donde la artista-mano-herramienta, se funde a sí misma para vaciar en el interior de estas criaturas todos aquellos misterios que anidan en su cabeza. Auras, destellos de pasados místicos y espacios que no son ni de aquí ni de allá, cobran cuerpo para dejar entrever cómo es que la ausencia humana crea silencios.

Francia, en alguna que otra conversación me llegó a mencionar que la fantasía siempre la ha perseguido. Llaves, dagas, escarabajos y armaduras le han causado fascinación desde que tiene memoria.

Contar cuentos y refugiarse en ellos.

Crecer en una ciudad tan ajetreada como lo es Monterrey, invita a buscar un refugio en donde colmar la sed de tranquilidad. Todo el tiempo con prisa, todo el tiempo sin pausa. En la alienación total de habitar en una jungla de concreto, permitirse soñar suena como un futuro distante. Lograr aprender a construir narrativas basadas en hechos no reales, requiere de despertar aquella imaginación que en la adultez se empequeñece hasta desaparecer. A pesar de que nadie nos enseña a imaginar, todos nacemos con la capacidad de hacerlo, lo cual nos deja ante una disyuntiva: dejarnos llevar por el vaivén de la fantasía o ser engullido por la mordaz realidad.

En esta exhibición, Monjaraz nos lleva a observar desde sus ventanas fantásticas, poniendo pausa a todo aquello que consideramos realmente importante. En la calma y sosiego, jugar a ser un niño observador se vuelve la única tarea. En una atmósfera envolvente, bajo la azulada sombra de una higuera, comienza un viaje donde la sensación y la intuición son la única manera de navegar.

— María Micha